autor:57 , term:55

Doc Holliday, el verdadero jugador agresivo

Gran amigo de Wyatt Earp, Doc Holliday fue uno de los mejores jugadores de Póquer, además de un pistolero sin escrúpulos
Wyatt Earp y Doc Holliday, compañeros de juego, compañeros de sangre
“Fue un dentista a quien la necesidad hizo jugador, el más hábil jugador y el hombre más rápido y mortal”
 
John Henry Holliday (1851-1887) fue toda una leyenda del llamado “Salvaje Oeste”, y en su tiempo era una auténtica celebridad, aunque sin duda era más temido que amado, dada su propensa costumbre a verse envuelto en todo tipo de tiroteos, muchos de ellos ocasionados por el juego. Otra de los personajes más famosos de su época era Wyatt Earp, quien sería su mejor amigo y compañero de correrías desde que Doc le salvara la vida cuando se disponía a capturar a un forajido.
Una vida repleta de acción que tendría un trágico final mucho antes incluso de empuñar su primera arma: El doctor estaba sentenciado con tuberculosis.
 
Una vida sentenciada
 
John Henry Holliday, más conocido como “Doc” Holliday por su profesión de dentista, nació un 14 de agosto de 1851 en Griffin, en el estado de Georgia, y ya desde pequeño demostraría una gran predisposición por la lectura y sería un gran estudioso tanto de la historia, como de las matemáticas o las lenguas antiguas como el latín o el griego.
Su familia además se lo podía permitir, pues su padre era un adinerado abogado que había combatido en la guerra Civil Americana, y en su casa nunca faltaría de nada.
El mayor problema que atravesaba la familia no obstante era que Alice Holliday, la madre de John, contrajo tuberculosis, una de las enfermedades más demoledoras de aquellos tiempos, y poco se pudo hacer por ella, muriendo a los dos años de mudarse a Valdosta, cuando John contaba con quince años.
La muerte de su madre produciría un gran cambio en el joven John, y la enfermedad le marcaría para toda la vida, sobre todo unos pocos años más tarde, cuando le tocaría padecerla en sus huesos.
A los 19 años abandonaría su casa para cursar los estudios de dentista en Filadelfia, y dos años más tarde conseguiría su diploma, y al poco tiempo se mudaría a Atlanta, donde viviría con su tío mientras comenzaba su prometedora carrera.
Una carrera que por otra parte sería más corta que prometedora, pues al poco tiempo de comenzar a pasar consulta privada, John fue diagnosticado con la enfermedad que se llevó a su madre, tuberculosis. No se conoce bien si sería su madre quien se la pasara o incluso algún paciente que tosiera mientras él le habría la boca, pues por esa época aún no se sabía que esta enfermedad era contagiosa, y pocas medidas se llevaban a cabo. John fue diagnosticado y su pronóstico era pésimo para los médicos. Le quedaban apenas unos meses de vida.
 
El Póquer como medio de vida
 
Doc se marchó de Atlanta buscando un paraje más seco donde su enfermedad pudiera frenarse, por lo que acabó instalándose en Dallas, Texas, donde abrió una nueva clínica, aunque pronto tuvo que buscarse otros medios para ganarse la vida, pues debido a su enfermedad, muchos pacientes empezaron a temer por su propia salud y cada vez eran menos los que acudían a sus expertas manos.
Fue entonces cuando Doc descubriría el Póquer. El juego no había sido ajeno en su vida, pues ya de pequeño jugaba habitualmente con su padre, pero nunca se lo había tomado tan en serio como para que esa fuera su principal fuente de ingresos.
La habilidad de Doc con el naipe era innata, y pronto se vio ganando grandes sumas para la época, lo que significaba tener que meterse en cada vez más líos, pues el juego atraía a los personajes más peligrosos y tramposos del lugar. Incluso el propio Doc aprendería a cortar el mazo con maestría y a repartir las cartas como un mecánico, algo muy habitual por aquel entonces.
Para defenderse, Doc solía llevar dos armas y un cuchillo escondido, y no fueron pocas las veces que tuvo que hacer uso de alguno de estos. De hecho poco a poco se fue convirtiendo en una persona cada vez más apática y agresiva, y su comportamiento era rudo con cualquiera, siempre dispuesto a batirse a duelo en la calle ante cualquier disputa, acompañado en parte este temperamento debido a su afición desmesurada a la bebida, que le paliaba los dolores de la e
nfermedad, al igual que el láudano.
El número de víctimas que iba dejando a su paso debido a discusiones por el juego iban en aumento, y en una partida, Doc disparó a la persona equivocada, pues se trataba de un miembro del ejército, momento en el cual su cabeza pasó a tener precio y tuvo que escapar.
Durante un tiempo se dedicó a recorrer el interior del país, pasando por ciudades como Denver, Cheyenne, o Deadwood, en Dakota. Más tarde acabó por volverse a dejar caer por Texas, concretamente en Fort Griffin, donde conocería a la mujer que le acompañó buena parte de su corta vida, Kate “Big Nose”, una prostituta del salón que frecuentaba Holliday y que sintió gran predilección por este cliente.
 
Una amistad casi inquebrantable
 
También fue allí donde conocería a su gran compañero, el Marshall Wyatt Earp, un agente de la ley poco ortodoxo amante del juego y con el que sellaría su amistad un año más tarde, cuando Doc salvó la vida a Wyatt, al evitar que unos vaqueros sin escrúpulos dispararan sobre el marshall cuando este se disponía a encarcelar a uno de estos.
Desde este momento ambos jugadores serían inseparables, y juntos recorrerían Texas y alrededores en busca de partidas donde poder hacer fortuna, y en las que arrastrarían un buen número de peleas, víctimas y heridas a sus espaldas, e instaurándose en diferentes ciudades, siendo una de en las que más tiempo pasaron Dodge City, en Kansas.
Uno de los lugares donde acabarían instaurándose, y uno de los más conocidos sería Tombstone, donde tendrían una de las disputas más famosas de toda la época, y por el que se hicieron con una fama desmedida, convirtiéndose en leyendas del Lejano Oeste.
 
El tiroteo de O.K. Corral
 
Doc Holliday se instaló en la ciudad de Tombstone junto a Wyatt Earp y los hermanos menores de este, Warren, Morgan y Virgil, quien era el nuevo Marshall del pueblo. El problema es que Tombstone era un lugar peligroso lleno de forajidos y gente al margen de la ley, y no eran pocos quienes querían ver caer a Wyatt y sus hermanos. En especial los hermanos Clanton, Ike y Billy, y los hermanos McLaury, Tom y Frank.
Tras un buen número de disputas entre el grupo de Wyatt Earp, con sus hermanos y Doc Holliday (quien además era un avezado tirador) y estos forajidos, finalmente sería en los establos del pueblo, O.K. Corral, donde se pondría punto y final a la disputa. O casi.
El tiroteo no duraría ni un minuto, y pasó a la historia como uno de los más sangrientos, y tan sólo Ike Clanton lograría escapar, aunque el grupo de Doc y Wyatt también sufrió diferentes heridas.
Meses más tardes se tomarían represalias, y Virgil sería herido de gravedad en el brazo, perdiendo la movilidad de este de por vida, y más tarde sería Morgan quien correría peor suerte, al morir de un disparo.
Wyatt y Doc se tomaron la venganza por su propia mano, asesinando a aquellos que creyeron culpables del homicidio de su hermano. Nunca llegaron a ser condenados por estos tiroteos, y cuando fueron apresados tras la pelea en O.K. Corral, fueron liberados alegando defensa propia.
Doc Holliday y Wyatt Earp dividirían sus caminos poco más tarde, debido a una discusión entre ambos. En 1887 Doc Holliday moría en su cama debido a la tuberculosis, y su amigo Wyatt Earp no conocería la noticia hasta meses más tarde.
Finalmente el Salvaje Oeste no pudo con el doctor, pero si lo hizo la enfermedad.
 
 
 
                           Contenido publicado en la edición de Noviembre.
                              ¿Te gustaría disfrutar de todo el contenido?
                                      

 

Artículos relacionados

Yossi Obadia finaliza séptimo en el evento #2 de l...
WSOP Main Event 2013: Pablo Rojas “Pableras” lider...
Viktor Blom “Isildur1” se somete a una ronda de Q...
Todo preparado para el gran día

Salas de póquer

100% hasta 500€
100% hasta 500€
100% hasta 600€
888
8€ Gratis
100% hasta 500€

Magazine Planet Póquer

Síguenos

Campeonato España