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| Opinión & Estrategia - Daniel negreanu |
 El Pro canadiense nos explica lo importante que puede resultar aumentar nuestro arsenal de manos según que momentos para resultar ser impredecibles en la mesa
Daniel Negreanu
Incorpora manos a tu repertorio
Hay que jugar más manos de lo habitual para tener éxito en los torneos de Póquer. Aunque un enfoque conservador puede ayudarte a arañar puestos, la única manera de ganar es variar jugando un rango más amplio de manos.
Pero ¿Qué manos debo añadir a mi repertorio?
Bueno, la verdad es que debes incorporar manos con las que te sientas cómodo porque es probable que con ellas tengas más confianza en tus decisiones postflop.
Muchos jugadores añadirán manos como A(t)8(d) en posición de robo cuando intentan atacar a las ciegas. No es que me oponga rotundamente a jugar este tipo de cartas; sólo en ciertas situaciones. El problema es que las manos A-x son muy difíciles de jugar después del flop. Las decisiones a que te vas a enfrentar se vuelven mucho más complejas.
Fíjate en algunos de los problemas que surgirán si alguien quiere ver tu mano A-x:
• Si en el flop sale un as, tendrás que preocuparte sobre ese débil kicker.
• Probablemente no igualará tu apuesta un jugador con una mano A-x más débil. Y, si en el flop sale A-7-2 y un rival lo ve, es probable que te gane.
• Admítelo: la mayor parte de los flops no van a ayudar, en cualquier caso.
• Tu A-x de mano puede ponerte en una situación complicada en la que cometas el error de igualar con la única esperanza de que tu rival se esté echando un farol.
Otras manos que pueden agregarse son las combinaciones como K-5 o Q-7 del mismo palo, pero estas manos plantean sus propios problemas.
Pongamos que estás de suerte y ligas un color con K-5 o Q-7 del mismo palo. Sería casi imposible evitar perder un stack enorme de fichas ante todo oponente que se hubiese aferrado a su as –una jugada común—y que al final ligase el mejor color posible.
Desde luego, con K-5 del mismo palo también tendrías dificultades con el kicker. Si sale K-7-2 en el flop, por ejemplo, tendrías que pensar que cualquier rival que tenga también un rey tendrá un kicker mejor que el tuyo.
Manos tipo A-8 y K-7 dan bastante buen resultado según y cómo: o sea, que si ya no hay más apuestas, ganan bastantes veces. Pero si las hay, esas manos tienden a perder botes grandes y a ganar botes pequeños, lo cual no es una buena combinación.
Ahora bien, cuando juegas con un stack corto o en un torneo con una estructura rápido, donde a menudo te ves obligado a hacer all in, es razonable incorporar estas manos a tu repertorio.
En los torneos de mucho dinero, sin embargo, estas manos dan más problemas que otra cosa: no valen la pena. Las mejores manos para incorporar en esos torneos son los conectores del mismo palo porque tienen el potencial de ligar tanto una escalera como un color.
Pongamos que decides jugar una mano como 56s y llegas hasta el flop. Probablemente no tengas que preocuparte sobre tu kicker si ligas una pareja de seis en el flop, y eso está bien. Si consigues hacer color, estupendo, pero ten cuidado con los botes grandes con resubidas porque es muy posible que tu rival tenga un color más alto.
Si ligas una escalera, sin embargo, ¡habrás dado con un filón! Esa mano gana un porcentaje elevado de veces. Y como se oculta tan bien, podrás ganar un bote enorme contra cualquier jugador que tenga de mano ases por ejemplo.
Pero sean cuales sean las manos no tradicionales que decidas agregar a tu lista, reacciona ante cualquier resubida del mismo modo: Abandonando.
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